La pertinaz sequía era noticia diaria en todos los «telediarios» desde que empezó el año . Habiéndome preparado para largas caminatas, ¡_odido colesterol!. Me dije:
«Si he de hacer alguna vez el Camino de Santiago, tendrá que ser antes de que los años no me quepan en la mochila».
No me gusta el calor veraniego ni las aglomeraciones; por lo que me decidí por los mesesde febrero y marzo. Como se necesita un propósito que te impulse en los momentos de duda y flaqueza, me propuse hacerlo para solucionar la sequía en España y agradecer mi vida privilegiada, por lo menos hasta ahora. Una amiga lo había hecho el año anterior desde Roncesvalles en las mismas fechas y sólo llovió en 4 etapas .
¡OBJETIVO CUMPLIDO! Llovió en 21 de las 33 etapas, 3 nevadas e interminables horas con las manos ateridas de frío, durante los meses más lluviosos y fríos que se han registrado últimamente.
Esta felicitación es un homenaje al peregrino y a los que en algún momento coincidieron conmigo.